Los supermercados llaman a no hacer compras masivas de cara al fin de semana

 

El sector alimentario ha hecho un nuevo llamamiento a los consumidores para que no hagan acopio excesivo en sus compras de cara al fin de semana, a la espera de que la reunión que tiene hoy el Gobierno con los transportistas pueda frenar el paro que está rompiendo la cadena de suministro. 

Durante toda la semana las principales asociaciones que representan la cadena alimentaria (sector primario, industria, distribución...) han pedido a los consumidores que compren con responsabilidad, a pesar de que ya hay escasez de algunos productos, sobre todo leche, en los supermercados de ciertas zonas del país más afectadas por la huelga.

En concreto, este jueves ha sido la directora de Competitividad y Sostenibilidad de la Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), Paloma Sánchez Pello, la que ha pedido calma: "La gente se pone nerviosa ante la posibilidad de desabastecimiento, el problema está muy complicado, pero el sector es responsable y lo ha demostrado durante toda la pandemia e intentará por todos los medios abastecer siempre que pueda", ha afirmado Sánchez Pello a Telecinco en declaraciones recogidas por Europa Press.

Ayer el sector agroalimentario compareció para insistir en la misma idea: tanto la industria como la distribución están haciendo enormes esfuerzos, a pesar de las circunstancias y con coste extra, para hacer que en los supermercados haya productos de todas las categorías. A la distribución le está costando 130 millones de euros diarios extra hacer que la mercancía llegue a las tiendas, pues hay camiones que son saboteados, otros necesitan escolta de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para llegar a destino y en muchos casos se está recurriendo incluso a furgonetas.

Mauricio García de Quevedo, director general de Fiab, ha cifrado este jueves las pérdidas del sector en 100 millones de euros diarios. Afecta a toda la cadena de valor, desde el aprovisionamiento de materias primas, lo que provoca cierres de plantas y afectaciones en el empleo, hasta la distribución a los locales y las exportaciones, lo que puede provocar pérdida de clientes.

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