Liberan 16 buitres negros en el Alto Tajo, una suelta histórica para consolidar la especie en el Sistema Ibérico Sur
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha liberado 16 buitres negros adultos en el Parque Natural del Alto Tajo, una cifra récord desde que comenzó el programa de reintroducción en 2020, con el objetivo de consolidar su población y favorecer el anidamiento en la zona a partir de la próxima primavera
El Gobierno de Castilla-La Mancha,
a través de la Consejería de Desarrollo
Sostenible, ha impulsado la mayor
suelta de buitres negros realizada hasta la fecha en el Parque Natural del Alto Tajo, con la liberación de 16 ejemplares dentro del programa de
reintroducción de esta especie amenazada en el Sistema
Ibérico Sur.
Este
proyecto, dirigido por la Junta de
Comunidades con la ejecución
técnica de Rewilding Spain y Terra Naturalis, forma parte de
las acciones autonómicas para recuperar
especies clave en el equilibrio de los ecosistemas y fortalecer los procesos naturales de los montes de
Castilla-La Mancha. Con esta nueva suelta, el número total de buitres negros
reintroducidos desde el inicio del programa en 2020 asciende ya a 37 ejemplares.
Ejemplares adultos capaces de reproducirse
En esta ocasión se trata de buitres negros
adultos, lo que incrementa notablemente las probabilidades de anidamiento y reproducción en el territorio a
partir de la próxima primavera. Los ejemplares, procedentes de centros de recuperación de fauna silvestre de la
región, fueron atendidos previamente por distintas patologías antes de ser
trasladados al aviario de aclimatación del Alto
Tajo.
Durante
varios meses permanecieron en fase de adaptación y fueron equipados con dispositivos GPS que permitirán su seguimiento en tiempo real por parte de técnicos
de la Junta y especialistas del Ministerio
para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO).
Una red de apoyo para garantizar su asentamiento
El plan de reintroducción incluye una red de seis
puntos de alimentación suplementaria, dieciséis
plataformas nido distribuidas entre el Alto Tajo y la Serranía de Cuenca, y dos
señuelos de tamaño real que favorecen el asentamiento de las
aves. Estas infraestructuras buscan crear un entorno seguro y propicio para su
integración en el ecosistema local.
El delegado provincial de Desarrollo Sostenible, Rubén García, calificó la iniciativa como “un paso decisivo para la consolidación del buitre negro en el Alto
Tajo”. “Un símbolo que lo cuenta todo es el buitre negro, que
vuelve a surcar nuestras sierras tras décadas de ausencia”, señaló, destacando
que el éxito de este programa “demuestra el
compromiso del Gobierno regional con la biodiversidad y la conservación de los
espacios naturales”.
Veinticinco años del Parque Natural del Alto Tajo
La liberación coincide con la celebración del 25
aniversario del Parque Natural del Alto Tajo, un espacio
protegido que se extiende entre Guadalajara y
Cuenca y que constituye uno de los mayores núcleos de
biodiversidad de la Red Natura
2000 en Europa. Según García, “con método, rigor y alianza, la
reintroducción avanza; las poblaciones crecen, las reintroducciones se
consolidan y el parque cumple su función de proteger y mejorar los
ecosistemas”.
El delegado
también destacó el éxito en la recuperación de otras especies amenazadas, como
el águila perdicera, cuya población ha pasado de
cuatro a cinco parejas en los últimos años, y el alimoche,
que ha incrementado su número en torno a un 10 %.
Un proyecto basado en la colaboración científica
El programa de reintroducción del buitre negro se apoya en la colaboración
entre la administración regional y entidades científicas. El presidente de Terra Naturalis, Jorge F. Layna, afirmó que “la recuperación del buitre negro como especie nidificante en el
Alto Tajo y la Serranía de Cuenca —desaparecida de este territorio hace más de
un siglo— representa un modelo riguroso de conservación”.
Por su parte,
el director de proyecto de Rewilding Spain, Pablo Schapira, subrayó que “el regreso del buitre negro al Sistema Ibérico Sur es fundamental
para fortalecer la cadena trófica y diversificar la función de las aves
necrófagas. Gracias a la colaboración entre entidades,
esperamos ver pronto al buitre negro anidando de nuevo en nuestras sierras”.
 




