Un pueblo de Cuenca será capital europea del turismo rural en mayo
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha anunciado este
viernes que la décima edición del Congreso Europeo de Turismo Rural (Coetur),
que organiza de manera anual EscapadaRural, se celebrará este año en el
municipio conquense de Belmonte el próximo mes de mayo.
Así lo ha adelantado la consejera de Economía,
Empresas y Empleo, Patricia Franco, tras mantener una reunión con la
responsable de Relaciones Institucionales de EscapadaRural, Alejandra Torent.
Será los próximos 8 y 9 de mayo, en un municipio del
que Franco ha destacado su potencial turístico gracias a su riqueza cultural y
patrimonial. "Este congreso europeo va a ayudar a continuar consolidando a
Castilla-La Mancha como destino en materia de turismo rural, un posicionamiento
que está quedando de manifiesto en los datos de ocupación rural de 2023",
ha afirmado la consejera.
Cabe destaca que Coetur se ha posicionado como punto
de encuentro y referencia para los profesionales del sector del turismo rural.
La última edición contó con la presencia de más de 300 agentes del sector entre
propietarios de alojamientos, representantes de las administraciones públicas y
empresas de turismo activo o actividades complementarias.
Con alrededor de 1800 habitantes, Belmonte es un
municipio situado al suroeste de la provincia de Cuenca que se erige como
territorio de transición entre la planicie manchega y la Serranía de Cuenca.
Una localidad con mucha historia, con un inicio
enmarcado en la época ibérica y romana, de las que se han encontrado restos
arqueológicos en el paraje de Las Horadadas. Asimismo, de su pasado visigodo,
en el siglo V, Belmonte mantiene una sepultura con laja de piedra aparecida en
el ábside de la Colegiata de San Belmonte.
El mayor reclamo del municipio es su castillo, que
con su exterior pentagonal extiende sus brazos de murallas hacia la población.
En el interior, sorprende con un esquema triangular en su patio de armas. Sus
cubiertas interiores están repletas de artesonados mudéjares que atrapan en una
belleza que se agranda con la decoración gótica de sus chimeneas.
Frente al castillo, la citada iglesia Colegiata de
San Bartolomé, con un estilo mayoritariamente gótico. Un tesoro lleno de
bondades arquitectónicas y artísticas como capillas, bóvedas, pinturas y
esculturas.