La Diputación de Cuenca presenta alegaciones para mantener todas las paradas del autobús Madrid-Valencia

Martínez Chana defiende que eliminar servicios públicos de transporte en zonas rurales es un golpe a la lucha contra la despoblación

La Diputación de Cuenca ha presentado alegaciones al anteproyecto del servicio de transporte regular de viajeros entre Madrid y Valencia, conocido como Corredor 12, con el objetivo de mantener todas las paradas actuales que afectan a distintos municipios de la provincia. Esta iniciativa responde a la publicación por parte del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible de un nuevo mapa concesional que prevé la supresión de varias paradas dentro del trazado que recorre Cuenca.

El presidente de la institución provincial, Álvaro Martínez Chana, ha explicado que contar con un sistema de transporte público por carretera que conecte los pueblos con Madrid, Valencia y Cuenca capital es esencial para la cohesión territorial. Según ha defendido, este tipo de servicios es imprescindible para garantizar el acceso a derechos básicos en el medio rural, como la sanidad, la formación, los trámites administrativos o el empleo.

Una cuestión de equidad social y cohesión territorial

Martínez Chana ha sido rotundo al afirmar que la eliminación de estas paradas obligaría a los vecinos a buscar alternativas privadas que en muchas zonas rurales ni siquiera existen, lo que agravaría la dependencia del vehículo privado y profundizaría la brecha entre el medio urbano y el rural. “La gente de las zonas rurales no necesita llegar antes, necesita llegar”, ha resumido el presidente, criticando la justificación del Ministerio que plantea reducir tiempos de trayecto a costa de sacrificar servicios esenciales.

En este sentido, ha subrayado que las decisiones en materia de movilidad deben estar alineadas con los principios de sostenibilidad, igualdad y lucha contra la despoblación, y ha recordado que un Gobierno progresista debe tener en cuenta las necesidades reales del territorio. “Reducir paradas es ir contra la movilidad sostenible como derecho, y debilita los esfuerzos que hacemos desde las instituciones para que nuestros pueblos sigan vivos”, ha denunciado.

Un llamamiento al Gobierno central

La Diputación de Cuenca espera que estas alegaciones sean tenidas en cuenta durante el periodo de exposición pública del anteproyecto, y confía en la sensibilidad del Ejecutivo central para corregir este planteamiento. “En otras ocasiones, el Gobierno ha demostrado compromiso con el medio rural. Confiamos en que esta vez también escuche la voz de nuestra provincia”, ha concluido Martínez Chana.

Con esta acción, la Diputación refuerza su papel como garante de los derechos de la ciudadanía rural, defendiendo la permanencia de unos servicios que son esenciales para la vida diaria y la permanencia en el territorio.

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