La Diputación de Cuenca restaura la parte de la muralla de Cañete junto a la iglesia de Santo Domingo
La Diputación de Cuenca ha invertido 100.000 euros en la
restauración de un lienzo de la muralla de Cañete para recuperar el aspecto
original que tenía esta ciudad amurallada al tiempo que se pretendía frenar el
deterioro de la iglesia de Santo Domingo anexa a este patrimonio histórico.
La diputada de Patrimonio, Ferias y Turismo, Mayte Megía, ha
visitado la localidad acompañada de su alcaldesa, Monserrat Poyatos, para
comprobar el resultado final del proyecto donde la regidora municipal ha
aprovechado para mostrar su satisfacción por la recuperación de una parte de la
muralla que durante años había permanecido oculta para vecinos y visitantes.
Las actuaciones que se han llevado a cabo en la zona han podido
eliminar la espesa vegetación que cubría el lienzo de piedra y que estaba
contribuyendo a que el deterioro de la muralla avanzar más rápidamente. Al
mismo tiempo, se han restaurado las zonas más afectadas y se han sellado los
remates de la muralla para evitar filtraciones de agua.
En este sentido, Megía ha valorado que esta actuación haya
contribuido al doble objetivo que era recuperar esta parte del patrimonio de
Cañete y al mismo tiempo evitar que uno de los edificios más queridos para los
vecinos como es la iglesia de Santo Domingo siguiera deteriorándose por las
filtraciones de agua que se producían desde la zona de la muralla.
La diputada ha querido poner en valor estas actuaciones para
recuperar el rico patrimonio que atesora nuestra provincia y ponerlo al
servicio de sus vecinos constituyendo un atractivo turístico, y por lo tanto,
un motor económico para nuestras zonas rurales. Por ello, ha querido señalar la
localidad de Cañete como un ejemplo de cómo patrimonio, turismo y desarrollo
pueden ir de la mano.
La alcaldesa quiso agradecer la implicación que la Diputación está
demostrando por su pueblo y por toda la comarca y explicó la intención del
Ayuntamiento de completar esta actuación con la construcción en los terrenos de
las antiguas escuelas de un parque subrayando que la mejor forma de conservar
el patrimonio es dándole utilidad para que los vecinos pueden sentirlo como
propio.