Un pueblo de Cuenca revela cómo fue el cambio climático hace 30 millones de años
En Carrascosa del Campo (Cuenca) están inmersos en
una excavación paleontológica en un terreno para descubrir cómo era la vida
hace 30 millones de años.
Quince investigadores llegados de universidades como
Cambridge, Gotemburgo o la Complutense de Madrid han descubierto, en pocos
metros cuadrados, fósiles de parientes y antepasados de rinocerontes y dientes
de sable. Su estudio es clave para conocer el cambio climático que enfrió la
tierra en esa era y la zoología de la Cuenca del Loranca.
El yacimiento paleontológico del Cerro Arenoso se
descubrió finales de los años 60 durante las obras del trasvase Tajo-Segura en
la localidad conquense. Las excavaciones realizadas han revelado la importancia
de este enclave en el estudio de la transición Eoceno-Oligoceno. Una época en
la que se pasó de un clima tropical a un enfriamiento global lo que produjo la
extinción de grupos de mamíferos, dando paso a una fauna más parecida a la que
hoy conocemos.