“La ley de bienestar animal se hace desde una mentalidad urbanita”
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha enviado un
escrito de alegación sobre el proyecto de ley de bienestar animal en el que
«enmienda en plano» el contenido de dicha legislación, puesto que entiende que
es una ley que se hace «desde una mentalidad urbanita«.
Así lo ha expresado Emiliano García-Page, presidente
de Castilla-La Mancha, en la presentación de Fenavin, donde ha criticado esta
ley impulsada por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.
Asegura que en el trato a los animales «no debe
imperar la ley de la selva», pero cree que estar norma va a despertar «malestar
en una parte de los animales«, concretamente «en los animales racionales, los
humanos».
Por ello ha defendido «la caza», puesto que asegura
que «no solo forma parte de la cultura, también de nuestra forma de ser».
Así, ha informado de que varias comunidades están de
acuerdo en que esta legislación no salga adelante, ya que, según ha expresado,
«podemos llegar a tiempo a frenar un enorme problema de entendimiento que
genere enfrentamiento».
Page también ha llamado a «no legislar contra nadie»
y ha dicho que «desde los ministerios y el resto de instituciones no tenemos
que levantarnos con la intención de ver a quién le hacemos la vida imposible».
El presidente
de Castilla-La Mancha ha defendido la importancia del sector agroalimentario
en la región y ha vuelto a cargar contra otro de los ministerios de Unidas
Podemos, el de Consumo, ya que entiende que lo ocurrido meses atrás fue «un
acoso enorme a la ganadería», que le ha obligado «a hacer varias entrevistas en
medios ingleses diciendo que la carne tiene todos los respaldos sanitarios»,
recordando que en la BBC se hizo un documental de 3 horas en el que «se
intentaban frenar la exportación».
«Estos actos habría que penalizarlos políticamente»,
ha dicho en relación a acciones como la de Alberto Garzón, aunque ha bromeado
que en el año en el que se ha «criticado» ese sector es «el que más carne hemos
exportado».
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