Víllora, San Martín de Boniches y Villar del Humo impulsan asociaciones de propietarios forestales para prevenir incendios y generar oportunidades rurales
Los tres municipios han iniciado el proceso de constitución de asociaciones de propietarios forestales, una fórmula clave para mejorar la gestión de los montes, prevenir incendios y crear nuevas oportunidades en el medio rural, según destacan los técnicos de UFIL y Reconecta.
De la formación a la acción
El proceso arranca tras las jornadas formativas celebradas en
agosto en varios municipios de la provincia con el apoyo de la Reserva de la
Biosfera Valle del Cabriel. En ellas se subrayó la importancia de la gestión
forestal activa y se presentaron experiencias de éxito en otros territorios.
Las juntas directivas provisionales ya trabajan en la
formalización de las asociaciones, con el objetivo de pasar de una gestión
individual y fragmentada a un modelo común y más eficaz.
Clave en la prevención de
incendios
En la provincia de Cuenca, gran
parte del monte privado está dividido en pequeñas parcelas sin gestión activa,
lo que dificulta la prevención de incendios y limita el aprovechamiento de los
recursos. Con las asociaciones, los propietarios podrán coordinar labores
preventivas, acceder a ayudas técnicas y económicas, y reforzar el arraigo
poblacional mediante empleo ligado al territorio.
“Un monte gestionado en común
produce más vida y riqueza, pero también es la mejor garantía contra los
grandes incendios que amenazan cada verano nuestros pueblos”, afirma Héctor
Abarca, cofundador de Dendron.
Un modelo replicable
Aunque los primeros pasos se han
dado en tres pueblos, Henarejos y Paracuellos también podrían sumarse al
proceso. Reconecta y UFIL destacan que la formación y el acompañamiento técnico
son esenciales para extender el modelo, que ya avanza en otras provincias como
Teruel y Soria.