¿Por qué si tienes un accidente en Madrid tienes más probabilidades de sobrevivir que en Cuenca?


OJOS DE MOYA | La provincia solo tiene una Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI) motorizada en la capital y otras dos en la provincia
Hace tiempo que la Dirección General de Tráfico tiene puesto el foco en las carreteras secundarias como objetivo prioritario para reducir los altos índices de siniestralidad.

Tal como detalla la revista Autobild, la decisión de reducir la velocidad máxima permitida en este tipo de vías de 100 a 90 km/h y de aumentar la presencia de radares es acertada y se apoya en cifras (dramáticas) que apuntan que el 75% de los accidentes de tráfico interurbanos se producen en vías convencionales (el 55% si se tienen en cuenta el cómputo total de siniestros).
La pregunta que nos planteamos es: ¿es solo la velocidad la que mata a los conductores en vías secundarias? ¿son los radares el único recurso necesario para reducir las cifras de mortalidad?
Galicia, la comunidad autónoma con más probabilidades de morir en un accidente de tráfico
El Atlas Nacional de Mortalidad en España que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE) sitúa a Galicia a la cabeza las comunidades autónomas con más riesgo de morir en accidente de tráfico. Por localidades, la más peligrosa es Begonte, en Lugo, con un 188% de probabilidades de no sobrevivir a un siniestro; le siguen O Corgo (168%) y Vilalba (167%), también en Lugo.
El informe del INE se centra en las comunidades autónomas más peligrosas, pero no se detiene a analizar las razones.
Si realizáramos un mapa de la mortalidad en carretera, veríamos que el norte de la península se lleva la peor parte. Entre otros motivos, porque tiene más carreteras convencionales y una mayor dispersión de los núcleos de población.
Cuando la distancia mata
Rafa disfruta desde hace unos meses de una merecida jubilación. Ha sido durante décadas médico de la UVI móvil del SUMA de Arganda del Rey (Madrid); ahora colabora con el programa Te Puede Pasar de AESLEME. Por su experiencia sabe que los accidentes en carreteras secundarias son más peligrosos por dos razones: suelen ser más graves y la distancia a recorrer hasta llegar a los heridos es mayor.
Durante años, Rafa ha prestado ayuda en accidentes de tráfico entre Arganda del Rey, una localidad al sur de la capital y Fuentidueña de Tajo, límite entre la comunidad de Madrid y Cuenca. En línea recta, ambas localidades distan algo menos de 50 kilómetros.
"Los tiempos de respuesta ante un siniestro vial dependen de la distancia", explica Rafa. "Una vez que se recibe la llamada de auxilio, los recursos se activan de inmediato pero en las zonas más alejadas podemos tardar hasta 45 minutos en llegar", relata. "La distancia es un factor terrible; en una UVI móvil el tiempo es oro; cuanto más tardes en llegar al hospital, menos probabilidades de supervivencia y más secuelas".
A pesar de todo, Rafa sabe que ha tenido suerte. Los conductores que sufren un accidente en la comunidad de Madrid , también. Madrid es la comunidad autónoma con más UVIs móviles por territorio geográfico y número de habitantes.
En Cuenca la realidad es otra. La provincia solo tiene una Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI) motorizada en la capital y otras dos en la provincia (una en Tarancón, a casi 90 km). Lo confirma Miguel Ángel, agente de Tráfico que atiende siniestros desde Cuenca capital hasta el límite con Guadalajara; distancia, en línea recta: unos 100 km.
"De Cuenca al límite con Guadalajara podemos tardar hasta 90 minutos en llegar", asegura Miguel Ángel. El motorista confirma que cuando se produce un accidente en la Serranía de Cuenca, lo habitual es que a la llegada de la Guardia Civil ya haya ayuda médica en el lugar del siniestro. El problema es que no siempre cuenta con los recursos adecuados.
El protocolo de actuación establece que ante un accidente de tráfico hay que movilizar los recursos disponibles más cercanos. Es por eso habitual que en el medio rural el médico del centro de salud más cercano sea el primero en llegar. "El problema surge cuando se necesita una UVI móvil y está o muy lejos o atendiendo otra emergencia", explica Miguel Ángel. "En más de una ocasión ha habido que pedir apoyo al helicóptero de Albacete, porque el de Cuenca estaba ocupado".
Ante un accidente de tráfico, el tiempo es vida
Sigamos aportando datos. Los expertos aseguran que entre el 30% y el 50% de las muertes en accidente de tráfico se producen en los primeros cinco minutos. También que el riesgo de fallecer como consecuencia de las heridas aumenta hasta un 75% en los primeros 60 minutos. Es lo que la Organización Mundial de la Salud llama la hora de oro.
Quienes están habituados a hablar de temas de seguridad conocen la frase que acuñó Adams Crowley,  cirujano militar y director del Centro de Atención al Shock traumático de Maryland (EE.UU), al respecto: "Hay una hora de oro entre la vida y la muerte. Si estás gravemente lesionado, tienes menos de sesenta minutos para sobrevivir. Puedes no morir entonces, pero lo puedes hacer tres días o dos semanas después, porque algo ha ocurrido en tu cuerpo que es irreparable".
El SAMUR que opera en la capital de Madrid está reconocido como uno de los servicios de asistencia sanitaria más eficaces. En 2019, su tiempo medio de respuesta, desde que recibe la llamada hasta que llega la ambulancia, fue de nueve minutos y 33 segundos. En la localidad de Carballino (Orense) por donde pasa la N-541, la carretera más peligrosa de España según el último informe de la Asociación Española de la Carretera, una "ayuda rápida" puede tardar más de 20 minutos. | LEER NOTICIA COMPLETA |

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