El Estatuto de la Mujer Rural se aprobará este jueves “como columna vertebral del desarrollo de los pueblos”
OJOS DE MOYA | Se priorizará el acceso de las mujeres a
las ayudas en el ámbito agrario y se promoverá que accedan a la titularidad de
las explotaciones | Se fomentará la afiliación de las mujeres agricultoras y
ganaderas a la Seguridad Social mediante ayudas y subvenciones
El Pleno de las Cortes
de Castilla-La Mancha aprobará este jueves el Estatuto de la Mujer Rural, una
norma que recoge todo un elenco de medidas para corregir la discriminación
múltiple a la que se ven sometidas las mujeres rurales y que tendrá más
intensidad en los lugares del medio rural más afectados por el problema del
despoblamiento.
“El Estatuto fomentará
nuevas oportunidades de empleo, mejorará la calidad de vida y alentará a las
mujeres a poner en práctica sus propios proyectos”, tal como ha explicado la
consejera de Igualdad y Portavoz, Blanca Fernández, que también ha resaltado
que se trata de una ley única por sus características en España y que se dirige
a mujeres que viven en municipios de menos de 30.000 habitantes.
La Ley quiere acabar con
las situaciones de discriminación que viven las mujeres en el medio rural y que
están relacionadas con la falta de oportunidades para entrar en el mercado
laboral, la falta de servicios, en particular, los que afectan a la
conciliación de la vida personal, familiar y laboral, o la escasa
representación en órganos de decisiones. Todas estas situaciones llevan
aparejadas la marcha de las mujeres desde el medio rural, lo que genera una
gran problemática, especialmente en los pequeños municipios ya que implica su
despoblamiento, envejecimiento y masculinización. La norma está estructurada en
cuatro títulos, 21 artículos, una disposición transitoria y una disposición
final.
“Por tanto, según
palabras de la consejera, “una de las prioridades que nos hemos marcado con
esta ley es mejorar las oportunidades para las mujeres que viven en nuestros
pueblos ya que son agentes clave para la vertebración y la cohesión social, es
decir, para el cuidado y mantenimiento de nuestros pueblos y también corregir
la discriminación múltiple a la que se ven sometidas en las zonas rurales”.
Líneas maestras de la Ley
A continuación, Blanca
Fernández ha enumerado las líneas maestras de esta Ley que pasan por la coordinación
de acciones en favor de la igualdad a través de la red de oficinas comarcales
agrarias con la que cuenta la Consejería competente en desarrollo rural; el
fomento de la formación en dos ámbitos, la capacitación, especialmente dirigida
a las mujeres rurales, y la igualdad, dirigida tanto al sector como al
funcionariado implicado en las labores de coordinación y el impulso de acciones
para facilitar la corresponsabilidad y luchar contra la división sexual del
trabajo.
Otra línea de acción irá
encaminada a conseguir que las asociaciones u organizaciones profesionales,
empresariales o de otra índole que operen en el ámbito agrario tengan una
representación equilibrada de mujeres en sus órganos de dirección para poder
acceder las ayudas públicas, para lo que se establece un periodo transitorio de
cuatro años desde la entrada en vigor del Estatuto.
También se priorizará el
acceso de las mujeres a las ayudas en el ámbito agrario y se promoverá que
accedan a la titularidad de las explotaciones en cualquiera de sus formas
posibles a la vez que se promocionará la figura de la Titularidad Compartida.
En ese sentido, cabe recordar que las mujeres representan el 49,8 por ciento de
la población de Castila-La Mancha, y un 16 por ciento de ellas vive en el entorno
rural, de ahí que se dé un impulso a la titularidad compartida, que ha
evolucionado de 28 a 177 explotaciones en los últimos cuatro años.
Por último, se fomentará
la afiliación de las mujeres agricultoras y ganaderas a la Seguridad Social
mediante ayudas y subvenciones destinadas al abono de las cuotas en el régimen
que corresponda a su actividad agraria.