La Semana Cultural de Cañete dedica una jornada especial a su recinto amurallado
OJOS DE MOYA | Se presentó la muralla como el conjunto de
su naturaleza más importante de la provincia de Cuenca y uno de los ejemplos de
fortificación califal más destacable de toda España
Bajo el título de
‘Sueños, Patrimonio y Futuro’, Cañete celebró ayer lunes una jornada especial
enmarcada dentro de la semana cultural de su Alvarada Medieval. Se trataba de
poner en valor, aprovechando el clima de celebración por el vigésimo
aniversario de la fiesta, las importantes labores de conservación y
restauración que se han venido realizando en este importante recinto amurallado
durante los últimos años.
La jornada se inició en
la iglesia de San Julián, escenario de los actos más solemnes e institucionales
que se llevan a cabo a lo largo de los diez días que dura La Alvarada. El acto
contó, una vez más, con la presencia del presidente de Diputación Provincial de
Cuenca, don Benjamín Prieto Valencia —quien ha querido participar activamente
en la vigésima edición de esta reconocida fiesta medieval—, y de Sagrario
Ibáñez Martínez, alcaldesa de la localidad.
Pese a que el eje
central de esta XX Alvarada gira en torno al mundo juglaresco, la Comisión
Organizadora ha querido dedicar este año una jornada especial al monumental
conjunto amurallado con el que cuenta la villa de Cañete. El momento era
oportuno, ya que en fecha reciente se han completado las labores de
conservación y rehabilitación de la puerta de las Eras, que abre paso desde el
casco urbano hasta los lienzos orientales de la muralla —el espacio denominado
paseo del Boleo—, y cuyo acceso desde el exterior ha permanecido bloqueado
durante décadas. El objetivo era, no sólo mostrar la importancia de los
trabajos realizados, sino presentar el recinto amurallado de Cañete como el
conjunto de su naturaleza más importante de la provincia de Cuenca y uno de los
ejemplos de fortificación califal más destacable de toda España.
Fue doña Mar Juzgado
Navarro, profesora de Historia del Centro Asociado de la UNED en Cuenca, quien
pronunció la conferencia ‘Las murallas de Cañete a la luz de las últimas
investigaciones’. A lo largo de la misma, se profundizó en todos y cada uno de
los elementos de los que se compone el conjunto amurallado de Cañete, así como
en las labores de conservación y en los últimos descubrimientos que se han
podido realizar durante las mismas. La profesora incidió en la importancia del
recinto, con muros que fueron levantados en la época califal, con una altura de
entre 5 y 7 metros y cubos añadidos a lo largo del siglo XII. Es muy
característico el sistema quebrado o de cremallera de las murallas de Cañete,
que también se puede observar en otros puntos de la provincia —como en el
espacio de la albacara de Uclés—, y que le dan un aspecto original y poco
común. Este sistema es especialmente visible en la parte oriental, en los
lienzos que discurren junto a la carretera de Valdemeca, que son, sin lugar a
dudas, los que mejor se conservan. El resto del recinto, aunque dañado por las
transgresiones vecinales y los cortes seccionales realizados durante el siglo
pasado para el acceso de vehículos, se conserva en casi toda su integridad,
haciendo de Cañete uno de los conjuntos amurallados más interesantes y mejor conservados
de toda la región.
En el acto también
estuvo presente Francisco Tórtola Gómez, arquitecto encargado del proyecto de
rehabilitación de la puerta de las Eras. Él pudo explicar de primera mano las
tres fases de restauración de este importante conjunto amurallado que se han
acometido en los últimos seis años y en los que la Diputación Provincial de
Cuenca ha invertido cerca de 590.000 euros. Dichas fases han incidido
especialmente en cinco puntos del recinto: la zona del Postigo y el entorno de
la Oficina de Turismo, con la parte del muro que hace de punto de apoyo para
uno de los flancos de la iglesia de Santiago; el paseo del Boleo, que recupera
para el público una zona marginal y casi desconocida de la villa; la puerta de
la Virgen, que alcanzaba ya un alto nivel de deterioro; los lienzos que
flanquean el conocido Huerto de Doña Julia, que habían perdido parte de su
paramento exterior de mampostería de piedra, y finalmente la recién
rehabilitada puerta de las Eras. Francisco Tórtola explicó como se habían
acometido esos trabajos, las dificultades encontradas y el criterio adoptado en
la labor de restauración.
Benjamín Prieto
Valencia, por su parte, defendió una vez más la importancia y la monumentalidad
de la villa de Cañete, y quiso poner también énfasis en el hecho de que las
labores de conservación realizadas sobre su patrimonio histórico sirven en gran
medida para aumentar el valor potencial como destino turístico de esta
localidad, generando más empleo y riqueza para toda la comarca. Durante la jornada
inaugural del pasado sábado, Benjamín Prieto ya felicitó a los cañeteros por
haber apostado durante veinte años por una fiesta como la de La Alvarada,
renovando el compromiso de la Diputación Provincial de Cuenca con esta
localidad serrana y su patrimonio monumental.
El acto fue seguido de
una visita dirigida por el cronista oficial de la villa, don Miguel Romero
Saiz, que permitió a los asistentes conocer in situ los trabajos realizados. El
recorrido finalizó en la misma puerta de las Eras, donde los asistentes,
acompañados de Benjamín Prieto y de la propia alcaldesa de la villa, pudieron
disfrutar de un vino de honor en compañía del grupo de guitarristas de Cañete,
que amenizó una tarde dedicada a la historia y al valioso patrimonio medieval
con el que cuenta esta localidad de la Serranía Baja de Cuenca.