Tiempo de Mayos
OJOS DE MOYA | Una
mirada a la tradición de los Mayos en la Serranía de Cuenca
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Mariano López Marín-Cronista Oficial de Salvacañete El 30 de abril era una fecha importante en el calendario
festivo de los pueblos de la Serranía de Cuenca. Era el momento del canto de
los Mayos, fiesta primaveral y de agasajo a las cualidades de la mujer serrana.
Con guitarras, laúdes, bandurrias, crótalos,
algún almirez o una botella de anís y el
omnipresente acordeón las puertas de las iglesias y las calles de nuestros
pueblos se llenaban de música, canto y
tradición y porque no de ronda festiva y bullicio callejero.
En muchos de nuestros pueblos se han perdido los
Mayos. Salvacañete, junto con otros
pueblos próximos como Cañete han tenido la suerte de conservarlos. Recuerdo en
la década de los años 1970 cuando los
recogí y la ilusión que ponía el tío
Mariano Yuste y sus hijas porque no se
perdieran.
Hoy están recogidos los Mayos y otras
manifestaciones del folklore de Salvacañete en la obra “Folklore de
Salvacañete” editada por nuestro Ayuntamiento
en el año 2000. La rondalla Virgen de Valdeoña se encarga de mantener
viva esa tradición y que cada año no falte el canto del Mayo a la virgen de
Valdeoña, nuestra patrona, ,en la puerta de la
iglesia.
Porque en Salvacañete ,como en muchos pueblos
próximos, primero se cantaba el Mayo a la Virgen de Valdeoña y después iban en alegre ronda los
músicos a cantar el Mayo a las
mozas que comenzaba así: Estamos a
treinta / del abril cumplido / alegraos damas / que Mayo ha venido.. En cada
puerta se subastaba la moza y “se le echaba de maya al mejor postor”
diciendo “a …..fulanito de tal recibes
por Mayo”..
Era una
noche de fiesta y diversión para músicos y para jóvenes. Con el dinero
obtenido de las subastas posteriormente se haría una comida. La maya tenía la
obligación de bailar con el Mayo que le habían echado en el baile del día de la
Cruz. El Mayo se obligaba a invitar a la maya a turrón el día de La Cruz, el 3
de Mayo y a ir con ella a la Romería de Santerón, el lunes de Pentecostés. El
Mayo ponía la montura enjaezada y la maya la merienda. A la noche siguiente a
los Mayos se cantaban por las calles y
en la las puertas de las casas “las músicas”, verdadero canto de alabanza a las
cualidades físicas de la mujer salvacañetera y de la Serranía de Cuenca. Comienzan así: “el primero /Como
capitán de guerra/siempre voy el delantero/a mí me tocó la suerte/ a mí me vino
a tocar / como más desobediente / el venirte a despertar”.
Esta tradición del canto de los Mayos
y de las músicas
estaba muy extendida por todos los pueblos de la Serranía de Cuenca
hasta que llegó la emigración, en la
segunda mitad del siglo XX, y en muchos se perdieron. En algunos hubo personas
que los conservaron y otras que los
recogieron y difundieron. Hay un trabajo impulsado desde la Mancomunidad “Los
Serranos” que engloba a muchos pueblos situados
cerca de Cañete que recoge muchos aspectos del folklore, la historia y
las tradiciones de esta zona.
Fue realizado por Cristina Sáiz López Caniego y
otros en el año 1999 y colaboré con la autora en todo lo referente a
Salvacañete El trabajo es “ Programa de recuperación y valoración del
patrimonio etnográfico.” Mancomunidad “Los “ Serranía de Cuenca . diciembre
1999. La obra tiene 2 volúmenes y 5 cdrooms. En este mismo sentido la obra de
mi paisano y amigo Aurelio Yuste Valero “ Voces del Pasado”, editada
en el año 2007 por la Excma Diputación
de Cuenca tiene un gran valor documental
porque recoge esas voces tradicionales de Salvacañete, muchas de ellas
relacionadas con el folklore de nuestro pueblo y nuestra tierra.
Entre los
pueblos con tradición del canto de los Mayos y las Músicas destacan Alcalá del Vega donde todavía cantan el
Mayo a la Virgen del Remedio. Boniches que conserva el Mayo a la Virgen. Campillos de Paravientos donde existía
la costumbre de que mientras los mozos
cantaban las mozas les tiraban huevos
duros. Campillos-Sierra donde todavía se sigue cantando el Mayo a la virgen
el 20 de agosto por la noche y se cantaba el Mayo a las mozas en el Cerrillo
del Tesoro y estas les colocaban en el
cuello un roscón en forma de anillo como
agradecimiento por haberles cantado. La Cierva con la misma letra del Mayo a las mozas que
el de Valdemoro y una letra distinta
para el Mayo a la Virgen. En La Cierva
las mozas debían pagar por cantarles el
Mayo y si no pagaban les tocaban la
Cencerrá.
En Laguna
del Marquesado se subastaban los Mayos de las mozas y éstas tenían que bailar con el que le había tocado. Esta costumbre
cambió y se hacía el sorteo de los Mayos para complacer a las mozas. En las
músicas del 1 de Mayo las mayas de La Laguna
hacían un rollo de bizcocho, que daban
al Mayo, siempre y cuando a la maya le agradase el Mayo. En Pajaroncillo después de cantarle un
Mayo a la moza se disparaban tiros al
aire. Si alguna maya no le gustaba el
Mayo que le habían echado se ponía el
mandil al revés .Las músicas podían
cantarse en Pajaroncillo en cualquier época del año.
Salinas
del Manzano
también tenía la costumbre de subastar el Mayo para las mozas. Las mozas daban donativos a los mozos y con
ese dinero se pagaba el baile del Día
del Patrocinio, el tercer domingo de Mayo después de la Pascua de
Resurrección. El patrón de este pueblo era San José y a veces se juntaban las
celebraciones de los Mayos con la de San José y el domingo del Patrocinio. En Tejadillos se reunían los vecinos del pueblo en la ermita del
Carmen para cantar el Mayo a la Virgen. Después se subastaban los Mayos de las mozas y se publicaban por la noche .
Cuando les cantaban el Mayo a las mozas
disparaban al aire con un
trabuco.
En Valdemorillo
y Valdemoro todavía se canta el Mayo a la Virgen y en Zafrilla
se subastaban los Mayos en la plaza, delante de una hoguera. Landete todavía conserva el Mayo a la
Virgen y el Mayo de las mozas , que
cantan los quintos o otras personas
pagadas por ellos. Mayos famosos son los de Tragacete.