El Año Jubilar de la Vera Cruz "caminará" por la Serranía Baja

OJOS DE MOYA| Las Tierras de Moya forman parte del camino santo desde los Pirineos hasta la localidad murciana de Caravaca de la Cruz, que celebra en 2017 su particular 'septenario' religioso
Señalización del Camino de la Vera Cruz en Garaballa.
La ciudad de Caravaca de la Cruz celebrará en 2017 un nuevo Año Jubilar. Esta ciudad del noroeste murciano recibió el 9 de enero de 1998, la concesión, por parte de la Santa Sede, de la celebración de un Año Jubilar a Perpetuidad en torno a la devoción a la Vera Cruz, a celebrar cada siete años. Sumándose de esta manera a los otros jubileos que se celebran también a perpetuidad en Jerusalén, Roma, Santiago de Compostela y Santo Toribio de Liébana.

Durante 2017 se realizarán actividades de toda índole que pretenden ofrecer al peregrino más oportunidades para disfrutar de Caravaca que arrancarán el próximo 8 de enero con la misa de apertura del Año Jubilar de la Vera Cruz, al que esperan que acudan dos millones de peregrinos, superando así la cifra del último Año Jubilar en 2010.
Y muchos de ellos lo harán recorriendo el viejo camino que desde Puente La Reina, en Navarra, desciende en dirección sur, atravesando parte de la Comunitat Valenciana, concretamente por el Rincón de Ademuz.
Muchos viajeros y turistas se sorprenden de encontrar por estas tierras, pintada aquí y allá, en postes, piedras o intersecciones de caminos, la cruz patriarcal, de doble brazo, del templo murciano. Un itinerario religioso, pero también histórico y patrimonial, que permanece olvidado y que es bueno, al menos cada siete años, poner en valor como una senda vertebradora del este peninsular.
900 kilómetros de santo camino
El Camino de la Vera Cruz desde los Pirineos es una ruta que recorren los peregrinos desde la cordillera montañosa hasta llegar a la población de Caravaca de la Cruz, donde se venera una reliquia de la Cruz en la que supuestamente Jesucristo fue crucificado y que encontró la Emperatriz Santa Elena.
Son varias las referencias históricas y literarias que narran esta peregrinación a través de la península Ibérica. Un recorrido que atraviesa Navarra, transcurre por Aragón, Valencia y Castilla-La Mancha, hasta llegar a la Región de Murcia. Casi 900 kilómetros que hoy han sido recuperados y puestos en valor para atraer a los nuevos peregrinos; aquellos que, emulando a los viajeros de antaño, rinden hoy culto y devoción a la Santísima y Vera Cruz de Caravaca.
En el caso de la Serranía Baja, el camino histórico hacia tierras murcianas atraviesa el corazón de la Tierras del Marquesado de Moya, llegando desde el valenciano Rincón de Ademuz hasta Moya y sus núcleos de población, Fuentelespino, Garaballa y abriéndose paso hacia la Sierra de Mira, desde donde continúa siguiendo a lo lejos el trazado del Cabriel camino de Albacete.

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